Rescue remedy 10ml Bach

Es el remedio de rescate, primer auxilio o remedio de urgencia. Viene preparado de origen por medio del sistema de colocar las cinco flores juntas y someterlas al método de solarización (mismo método que se utiliza para elaborar el resto de flores). Bach escogió estas esencias por las cualidades particulares de cada una, siendo la mezcla perfecta para atender situaciones de emergencia. Se puede adquirir ya elaborado o prepararlo, con la salvedad de que se añade el doble de gotas que a cualquier otra mezcla.

Se utiliza para crisis de urgencia, situaciones ante las que se pierde el control emocional  como: accidentes, agresiones, malas noticias, discusiones violentas, fuerte tensión física o psíquica, crisis nerviosas, desvanecimientos, antes o después de parto, intervenciones quirúrgicas, situaciones comprometidas (entrevista, hablar en público)… etc… Estaríamos hablando de un shock de emergencia, no a nivel clínico, sino a todo aquello que  desintegra nuestro sistema energético; por eso es muy importante tenerlo siempre a mano, en el botiquín de casa o en el coche.

En casos de accidentes o enfermedades repentinas, Recue no sólo ayuda a las víctimas, sino también a aquellos que son meros espectadores como médicos, ayudantes, enfermeros y familiares. Procura una gran tranquilidad a los pacientes, pero además ayuda a serenar y dar confianza a los que les rodean, algo fundamental en un estado crítico.

Rescue no debe convertirse, por ninguna circunstancia, en un hábito permanente. Se ideó como primer auxilio en situaciones de urgencia psíquicas, insignificantes o importantes, pero no para equilibrar una manera irracional de vivir que destruye la personalidad. Para estos casos ya se elaboran otras mezclas distintas.

La dosificación es individual según el caso y la situación:

En casos agudos: verter directamente cuatro goas del frasco del concentrado en una taza de agua  y beberla a sorbos hasta que estado de shock cesa. Luego un trago cada quince, treinta o sesenta minutos. Si no se tiene agua o cualquier otra bebida a mano se pueden administrar directamente del frasco.

En caso de inconsciencia: se administra con ayuda del cuentagotas directamente del frasco de concentrado, vertiendo una gota sobre labios, encías, sienes, fontanales, detrás de las orejas o en las muñecas.

También puede aplicarse externamente con la ayuda de vendajes o compresas, añadiendo unas gotas a medio litro de agua en la que luego se irán empapando.